“El talento de convertir verdades en tonterías”

El discurso sobre el desempeño de la economía, en lugar de ayudar a Cordero, lo ha frenado.

Francisco Garfias

Es un axioma que el delfín de Felipe Calderón para sucederlo es Ernesto Cordero. “Está clarísimo que es su preferido”, nos reiteró, hace muy poco, uno de los allegados al Presidente de la República. La pregunta que se hacen al interior del PAN es si esa preferencia se mantendrá hasta la obstinación.

El secretario de Hacienda no crece en las encuestas, a pesar del evidente apoyo que se le ha dado al más alto nivel. En las preferencias electorales recoge apenas 7.5 por ciento.

Está por debajo de Josefina Vázquez Mota, 33.4%; Santiago Creel, 33%; Alonso Lujambio, 7.6%, según la última encuesta de Consulta Mitofsky. Sólo supera a Emilio González Márquez, 6.3%; y Heriberto Félix, 1.4 por ciento.

A Cordero lo han “placeado” como a nadie. Ha sido orador único en actos importantes de proyección nacional. Más de 130 notables del PAN —entre ellos cuatro gobernadores azules— publicaron un polémico desplegado de apoyo a sus aspiraciones.

Los elogios que le hacen, directa o sesgadamente, son difundidos en televisión y en horario triple A.

Allí está el caso del alcalde panista de Querétaro, Francisco Domínguez. “Ernesto es como nosotros. Créanme que conozco a varios secretarios, varios que son secretarios de Estado, y son medio mamoncitos”, dijo el edil, en presencia de Cordero.

Javier Lozano, el gallo que no llegó al palenque, admitió abiertamente que sus simpatías están con el delfín del Presidente.

Cordero, además, lleva la batuta en el discurso sobre el desempeño de la economía. Pero este discurso, en lugar de ayudarlo, lo ha frenado. Quedó estigmatizado con la torpe declaración de que seis mil pesos son suficientes para tener casa, carro y escuela. Pero también que México no es un país pobre, sino de renta media, según los indicadores del FMI y del Banco Mundial. Algo inadmisible en un país con millones en pobreza alimentaria.

“Tiene el extraño talento de convertir verdades en tonterías”, dijo, hace poco, Jesús Silva Herzog, en el programa radiofónico que conduce, en XEW, el talentoso periodista Carlos Puig.

Los defensores de Cordero se montan en 2006 para defender las aspiraciones del secretario de Hacienda. Recuerdan que Felipe Calderón ni siquiera figuraba en las encuestas. Creel lo superaba ampliamente, pero no había tejido los suficientes apoyos al interior del partido.

La “comentocracia” —el copyright es de Jorge Castañeda— pasó por alto que la elección del candidato presidencial del PAN no era abierta a la población, sino acotada a un universo mucho más pequeño: militantes y adherentes. Felipe ganó ampliamente.

Entre los integrantes del gabinete que aspiran a la candidatura presidencial se mantienen otros dos secretarios de Estado: Alonso Lujambio y Heriberto Félix. Las aspiraciones del segundo son calificadas como “una vacilada” al interior del azul. “Ni siquiera es del PAN”, subrayan.

El otro calderonista, Lujambio, no se baja. Anoche quedó claro. El titular de la SEP participó en un magno acto con panistas traídos de todo el país. Buscaba demostrar que sigue vivo. “Queremos prender y seguir adelante con el gallo azul no desplumado”, nos dijo Mariana Gómez del Campo, coordinadora de los asambleístas del PAN y una de las principales promotoras de la causa de Alonso.

Otro partidario de Lujambio nos dijo que la única manera de que el secretario de Educación abandone la contienda interna es que el presidente Calderón se lo pida expresamente.

El anuncio de que Luis Videgaray y Miguel Osorio Chong dejaron de ser presidente estatal del PRI y delegado del CEN en el Estado de México, respectivamente, desató toda clase de especulaciones. El mismísimo Humberto Moreira, al dar a conocer los cambios, precisó que Raúl Domínguez Rex suple al primero y Humberto Lepe, hombre muy cercano a Beatriz Paredes, al segundo.

Videgaray es diputado federal con licencia. En San Lázaro presidía la Comisión de Presupuesto. Se especulaba ayer que regresaría a la Cámara baja para apoyar las negociaciones sobre el paquete económico para 2012. A Osorio Chong lo ubican como secretario técnico del Consejo Político Nacional del PRI, próximo a renovarse.

“A mí no me han dicho nada. Por el momento estoy desempleado. Me voy unos días de vacaciones. A ver qué pasa cuando regrese”, evadió el ex gobernador de Hidalgo. En Insurgentes Norte nos confirman que va a incorporarse el CEN al concluir su descanso. No precisaron dónde.

Osorio calificó su relevo como delegado como un acto de congruencia. “Luis ya había anunciado su salida. La tradición, en el Estado de México, es que si se va el presidente del partido, se va también el delegado”.