La turbulencia financiera sí golpeará al país; viven los mercados jueves negro
Agustín Carstens, asegura que México está protegido. Además, dijo no estar preocupado por la situación de Estados Unidos, sino por la crisis europea
Fernando Franco y Gabriela Chávez
Además, dijo no estar preocupado por la situación de Estados Unidos, sino por la crisis europea.
En entrevista con Pedro Ferriz de Con, de Grupo Imagen Multimedia, informó que en 18 meses el acumulado de las reservas internacionales asciende a 45 mil millones de dólares, además de que existe una línea de crédito que el país adquirió de parte del FMI por 73 mil millones de dólares; es decir, México cuenta con 200 mil millones de dólares para proteger al país. En lo que va del año, Banxico ha comprado más de 80 toneladas de oro, que equivalen a cinco mil millones de dólares.
Las cifras, aseguró, le dan confianza a los inversionistas.
Se colapsan bolsas en el mundo
Las bolsas en el mundo tuvieron un jueves negro, ante mayores temores por un enfriamiento económico de Estados Unidos que lleve a una nueva recesión y la posibilidad de que se extienda la crisis en Europa.
El indicador Dow Jones de Estados Unidos sumó su octava jornada consecutiva con una caída de 4.31% y el Nasdaq descendió 5.08%, mientras que el Índice de Precios y Cotizaciones (IPC) de la Bolsa Mexicana de Valores hiló su cuarta baja consecutiva, con una pérdida de 3.37%, la peor del año.
Las previsiones pesimistas del presidente del Banco Central Europeo (BCE), Jean Claude Trichet, sobre la economía del Viejo Continente provocó que se desplomaran las principales bolsas en Europa, que cayeron más de tres por ciento.
Londres perdió 3.43%, alcanzando su nivel más bajo desde el 2 de septiembre pasado; Madrid cayó por debajo de los nueve mil puntos, por primera vez desde junio de 2010, y París descendió 3.90%, su principal revés en dos años y su novena jornada consecutiva en números rojos.
La Bolsa de Fráncfort perdió 3.40%, la de Zúrich un 3.61%, y la de Milán, donde el índice de FTSE Mib quedó suspendido una parte de la tarde, sufrió un descalabro de 5.16%.
Europa el epicentro
La incertidumbre que se vive a nivel mundial por la desaceleración económica estadunidense y los problemas fiscales en Europa provocó ayer una jornada roja en los mercados financieros internacionales.
El índice líder de la Bolsa Mexicana de Valores (BMV), el IPC, se desplomó 3.37 por ciento, con lo cual registró su mayor descenso desde 22 de junio de 2009. En la última sesión finalizó en 33 mil 322.63 unidades, tras perder mil 161.74 puntos.
En Wall Street, el promedio industrial Dow Jones se derrumbó 4.31 por ciento, al ubicarse en los 11 mil 383.45 enteros, nivel no visto desde diciembre. Su descenso diario fue el mayor desde el 10 de febrero de 2009.
El índice tecnológico Nasdaq se precipitó 5.08 por ciento, para cerrar en dos mil 556.39 enteros.
El gobernador del Banco de México, Agustín Carstens, informó, en entrevista con Pedro Ferriz de Con, que la situación fiscal por la que atraviesan algunas economías de Europa es un factor que le genera más incertidumbre que el problema de deuda en Estados Unidos.
“No estaba preocupado por lo que estaba sucediendo en EU, no es como el caso de Europa. Por ejemplo, el caso de Grecia sí es grave porque es un problema de solvencia. El tema estadunidense era un problema político y no de solvencia”, comentó.
La jornada negativa que se registró en los principales mercados accionarios del mundo derivó, precisamente, de la incertidumbre que generó el presidente del Banco Central Europeo (BCE), Jean-Claude Trichet, quien dejó entrever posibles afectaciones económicas por las dificultades fiscales de algunas naciones europeas.
El BCE anunció “un arsenal” de medidas para evitar que la crisis de la deuda arrastre a Italia y España y llegue al corazón de la Eurozona, pero sin convencer a los mercados.
El banquero central dijo que el programa para la compra de títulos de deudas soberanas nunca se había interrumpido, pese a que no se ejercita desde hace más de tres meses.
“Nunca he dicho que el programa de compra de títulos se haya interrumpido”, dijo Trichet en referencia a la cuestión de si esta herramienta, que ha comprado cerca de 75 mil millones de euros en deuda pública, ha terminado, tras cuatro meses de inactividad.
La respuesta en las bolsas europeas no se hizo esperar. El mercado accionario de Londres se derrumbó 3.43 por ciento, el de Alemania 3.40 por ciento, el de Madrid 3.89 por ciento y el de Francia 3.40 por ciento, con lo cual llegó a su nivel más bajo desde julio de 2009.
En el continente Americano no sólo las bolsas se vieron afectadas. El peso mexicano se depreció 1.45 por ciento, de acuerdo con el banco central. El tipo de cambio en su valor referencial a 48 horas finalizó en 12.0100, tras hundirse 17.15 centavos.
El petróleo también sufrió las consecuencias. El WTI descendió 5.30 dólares, tras cerrar en 86.63 dólares. El Brent, que se comercializa en Londres, descendió 5.98 dólares, para concluir en 107.25 dólares.
En tanto, el oro cerró a la baja, debido a que los temores a una recesión afectaron los mercados mundiales, lo que forzó a los inversionistas a liquidar sus posiciones del lingote para cubrir otras pérdidas. El oro al contado bajó 0.6 por ciento a mil 651.40 dólares la onza.
México se fortalece
Agustín Carstens reconoció que la turbulencia en los mercados sí se va a resentir en México, sin embargo, “si vamos en un barco, éste va a ir bien provisto de víveres para pasar la turbulencia y llegaremos a buen puerto”.
Destacó que nuestra economía realizó políticas fiscales prudentes que hoy ayudan a afrontar la situación que se vive en el exterior. Recordó que México tiene una protección superior a los 200 mil millones de dólares, derivado de las reservas internacionales y la Línea de Crédito Flexible (LCF) con el Fondo Monetario Internacional (FMI).
El secretario de Hacienda, Ernesto Cordero, aseguró que el país tiene un menor riesgo, en comparación a Francia, y que el mal día que se vivió en los mercados financieros internacionales es resultado de la mala conducción económica y de la irresponsabilidad de sobreendeudamiento en la que cayeron algunas naciones y no de la mala suerte o de algo no previsto.
“Lo que se vive es la incredulidad de que los países van a poner en orden su casa, de que van reducir el gasto, los programas sociales y en seguridad y van subir impuestos”, dijo el funcionario.
Aseguró que esos países actuaron con una mala política económica y gastaron más de lo que tenían, “y ahora están poniendo en un serio riesgo de incertidumbre al resto del mundo”.
Señaló que el gran reto es que la turbulencia que se vive en la BMV no se transmita a la economía real, es decir, aquella que la población siente en sus bolsillos.
“México también está sintiendo la turbulencia financiera, la BMV, al igual que todas las bolsas en el mundo, está teniendo malos días, hay incertidumbre en el mercado cambiario, pero en México las cosas se ven diferentes”, dijo.
Insistió que ninguna economía puede presumir que está a prueba de balas, pero en México, acotó, la situación es diferente, ante las medidas que se han tomado.
Mercados seguirán volátiles: analistas
El desplomen en los mercados financiero internacionales causó varias reacciones políticas y económicas, debido a la creciente preocupación por un cambio en la realidad económica que implicaría más países en crisis, crecimiento de desempleo y fragilidad de las principales monedas.
En Estados Unidos , Mike Ryan, analista en jefe de UBS Wealth Management Americas describió el panorama como “sombrío”, en específico para el mercado de bonos y para los mercados financieros.
A su vez José Manuel Barroso, presidente de la Comisión Europea, insistió en que “la urgencia es Europa, ya que la crisis se está expandiendo” y exhortó a los líderes a soportar a la zona euro.
Desde la visión de los inversionistas, Bob Doll, estratega de mercados derivados para BlackRock, comentó en entrevista para CNNMoney, que esta vez, “los inversionistas están realmente preocupados”; después de que se aprobara el acuerdo para el techo de deuda estadunidense se pensaba que el mercado levantaría, pero no lo hizo y ahora “todos tienen miedo”.
Sin embargo, Doll dijo que aún ve lejana una recesión fuerte en Estados Unidos.
Por su parte, el banco danés Saxo, refirió que las decisiones políticas y la tensión creada a partir del acuerdo para alcanzar un alza en el techo de deuda estadunidense fue el detonante principal para las consternaciones por la estabilidad mundial.
La bala financiera impactó también la opinión de Bank of América. El banco comenzó por perfilar a la baja el ritmo de crecimiento de México.
“Aunque seguimos esperando un crecimiento del Producto Interno Bruto de 4.0 por ciento para 2011, las decepcionantes cifras que han estado surgiendo en EU nos llevan a reducir nuestra proyección de crecimiento PIB 2012 de 4.5 por ciento a 4.0 por ciento, con riesgo a la baja”, destacó Ezequiel Aguirre, economista para América Latina, en un reporte de análisis de BofA Merrill Lynch Global Research.
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