Tensiones andinas persistirán pese a apretones de manos
CARACAS (Reuters) - Los líderes de los países andinos parecieron alcanzar el viernes una solución amistosa a la mayor crisis diplomática en la región en años, pero expertos advierten que la tensión seguirá presente tras la incursión de Colombia en suelo ecuatoriano para matar guerrilleros.
El presidente colombiano, Alvaro Uribe, se disculpó ante Ecuador y estrechó las manos del presidente ecuatoriano, Rafael Correa, quien ha recorrido la región durante toda la semana calificando a Uribe de mentiroso.
El mandatario venezolano, Hugo Chávez, un duro crítico de Estados Unidos, se sumó el viernes al apretón de manos después de liderar la condena de Latinoamérica a Colombia y de enviar tropas a la frontera para prevenir lo que llamó la amenaza de una invasión colombiana apoyada por Estados Unidos.
Pero es poco probable que las tensiones se disipen dada la posición de Colombia como el único aliado de Estados Unidos en una región donde hay una cada vez mayor oposición a Washington y la actual guerra de Uribe contra las FARC, que podría llevar a más incursiones en territorio de sus vecinos.
"La tensión subyacente es muy fuerte. La situación ahora se ha calmado por el momento, pero en el mediano plazo las tensiones seguirán ahí," dijo Patricio Navia, una analista de la New York University y la Universidad Diego Portales de Santiago.
Correa y Chávez seguirán simpatizando con las FARC, un grupo marxista financiado en gran parte por el narcotráfico y que ha matado a miles de colombianos en un conflicto interno de cuatro décadas.
Los países de América Latina criticaron a Colombia, mientras que George W. Bush defendió a Uribe, quien recibe miles de millones de dólares en ayuda estadounidense para luchar contra el narcotráfico y los rebeldes.
Pero incluso pese a que Uribe pareció aislado el viernes mientras escuchaba discursos hostiles en la cumbre del Grupo de Río de presidentes latinoamericanos en Santo Domingo, República Dominicana, analistas dicen que ahora tiene cartas fuertes que obligarán a los líderes de la región a apoyar su campaña contra las FARC.
Uribe tiene ahora un tesoro oculto de información sobre las FARC, hallado en los computadores que se encontraron en la incursión en Ecuador, que afirma demuestra que las guerrillas estaban siendo ayudadas por Correa y Chávez.
"Hay mucha información allí que ayuda a la inteligencia colombiana," dijo José Vicente Carrasquero, profesor de ciencias políticas en la Universidad Central de Venezuela en Caracas. "Ellos van a intentar tomar ventaja de eso, ellos tienen las cartas para jugar y las van a jugar," agregó.
APRETONES DE MANOS
La disputa entre Chávez y Uribe no fue la primera en torno a las FARC, el grupo insurgente más antiguo de América Latina. Hace tres años, ambos tuvieron una pelea similar después de que Colombia capturó a un rebelde de las FARC en territorio venezolano.
Comparando a las FARC con los movimientos revolucionarios del pasado de América Latina, los líderes izquierdistas de Nicaragua y Bolivia su sumaron el viernes a las críticas contra Uribe, cuya postura dura contra las impopulares FARC le ha merecido la admiración de sus compatriotas.
Pero Uribe insistió en que el grupo financiado por el narcotráfico que está atacando a un gobierno democráticamente electo no es igual a las revoluciones del pasado contra las dictaduras en América Latina.
"El Gobierno colombiano tiene ahora mucha información sobre qué están haciendo las FARC con Venezuela y Ecuador (...) No creo que Chávez vaya a dormir muy bien," dijo Navia.
El analista dijo que Chávez tendrá que moverse rápido para negociar con las FARC de manera que liberen a más rehenes que han mantenido cautivos durante años en campamentos en la selva, sólo para justificar sus contactos con el grupo.
Chávez ya ha negociado la liberación de seis rehenes este año, incluso pese a que Uribe intentó retirarlo del proceso de negociación.
Expertos políticos dijeron que la incursión en Ecuador, en la que murió el segundo al mando de las FARC, y la muerte de otro importante líder guerrillero esta semana significan que el grupo está debilitado y que podría tener que aceptar los términos de Uribe para negociar un intercambio de prisioneros y no al revés.
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