Morales propone autonomía si se acepta referendo constitucional
LA PAZ --
El presidente Evo Morales en el diálogo que mantiene con los opositores propuso impulsar un régimen de autonomías regionales si éstos aceptan un referendo para ratificar su proyecto de Constitución, según se informó el viernes oficialmente.El propio mandatario dijo el viernes en Panamá donde se hallaba de visita, que el planteamiento no fue acogido por prefectos (gobernadores) opositores.
"Propuse dos temas centrales: un acuerdo para compatibilizar las propuestas autonómicas con la nueva constitución política. Algunos prefectos no quieren firmar", dijo en una rueda de prensa en la capital panameña.
"El presidente ha propuesto la viabilización de la convocatoria a referendo constitucional mejorando el capítulo de las autonomías. La propuesta está en mesa", había dicho poco antes a los periodistas en Bolivia el viceministro de Descentralización, Fabián Yaksic.
Yaksic ha sido delegado como portavoz del Ejecutivo en las conversaciones que comenzaron el jueves en Cochabamba entre el gobierno y ocho prefectos (gobernadores), en presencia de veedores internacionales.
El viernes arribó a La Paz el secretario general de la Organización de Estados Americanos, OEA, el chileno José Miguel Insulza, para seguir de cerca el diálogo. "Todos esperamos que la situación se estabilice en Bolivia. Nuestra disposición es de ayudar", dijo Insulza.
Morales volverá de Panamá para reincorporarse a las negociaciones con los prefectos el sábado, dijo Yaksic al informar sobre el avance en las conversaciones, en las que también participa el vicepresidente Alvaro García Linera.
No se conocen detalles de la oferta, que habría sido puesta en discusión en las negociaciones que se llevan adelante a puerta cerrada tras la instalación de tres mesas de discusión: en una se debatirá la devolución de un impuesto petrolero que reclaman las regiones; en otra las autonomías y la nueva Constitución, y una tercera buscará acuerdos para designar en el Congreso a magistrados y otras autoridades nacionales.
La crisis del país se precipitó precisamente ante el fracaso de la Asamblea Constituyente hace una año de concertar una carta constitucional de consenso, lo que llevó a cuatro regiones a impulsar procesos autonómicos de facto que el gobierno ha tildado de ilegales.
El proyecto constitucional que impulsa Morales propone varios niveles de administración autónoma en las regiones con igual jerarquía y también reconoce autonomía para los pueblos indígenas, lo que es rechazado por los prefectos opositores que alegan que esa propuesta es inaplicable.
El régimen de autonomía que promueven líderes regionales se basa en una administración local con base en el prefecto que pasaría a llamarse gobernador con amplias facultades.
La confrontación en esos temas se ahondó tras un referendo el 10 de agosto sobre los mandatos del que salieron triunfantes Morales y los prefectos opositores, que retuvieron sus cargos, y derivó en violentas protestas opositoras que la semana pasada cobraron la vida de 15 personas.
Los hechos más violentos ocurrieron cerca de Cobija, capital de Pando, donde fueron hallados otros dos cadáveres en la zona, y que se espera un informe forense para determinar las circunstancias de sus muertes, según informó el viernes el ministro de Gobierno, Alfredo Rada.
Rada dijo además que Bolivia pidió a Brasil la expulsión de opositores regionales que buscaron refugio en territorio brasileño tras cruzar la frontera desde el departamento de Pando.
"Nos hemos puesto en contacto con autoridades brasileñas para indicarles que se trata de delincuentes y no correspondería darles asilo y una vez identificados debería procederse a la expulsión", dijo Rada a la prensa.
En Brasilia, funcionarios del Ministerio de Relaciones Exteriores señalaron que no habían recibido pedido alguno de Bolivia para la expulsión de opositores.
Uribe comienza cabildeo por TLC en EEUU y se reúne con tres ex rehenes
El presidente colombiano, Alvaro Uribe, inició el viernes en Washington una visita de cabildeo en favor del TLC que su país firmó con Estados Unidos en 2006, durante la cual será recibido por el mandatario estadounidense, George W. Bush, y se reunió con tres ex rehenes de la guerrilla de las FARC.
En su primera actividad oficial, una conferencia en el conservador centro de estudios Brookings Institution de la capital norteamericana, Uribe abogó por el tratado de libre comercio (TLC), que está en apuros en el Congreso norteamericano.
"Esperamos tener en cualquier momento la aprobación de nuestro TLC en Estados Unidos'', sostuvo Uribe, quien argumentó que el acuerdo significaría más inversiones para Colombia que ayudarían al país a combatir las actividades ilícitas como narcotráfico o el accionar de las guerrillas.
Fuertemente cuestionado por la oposición demócrata que controla el Congreso norteamericano, el TLC colombiano tiene pocas chances de lograr una aprobación en el corto plazo según analistas y observadores en Washington, y las esperanzas del gobierno de Uribe están cifradas en una luz verde luego de las elecciones presidenciales norteamericanas del 4 de noviembre.
La campaña electoral que avanza, y las dificultades de la economía estadounidense, están lejos de sumarle simpatías a los acuerdos comerciales aún pendientes en el Congreso.
De no obtener el acuerdo comercial firmado hace casi dos años, el gobierno colombiano deberá contentarse con las llamadas Preferencias Arancelarias Andinas (ATPDEA) que Estados Unidos otorga unilateralmente a Colombia, Bolivia y Ecuador, y que permiten a estas naciones exportar productos sin aranceles al país del norte en contrapartida por su cooperación en la lucha antidrogas.
Pero Uribe, quien reiteró que Colombia es el "mejor aliado'' de Estados Unidos en la región, argumentó que los inversionistas no confían en las preferencias unilaterales, que se ven sometidas a revisión y aprobación periódicamente (las actuales vencen el 31 de diciembre próximo).
Uribe se comprometió a tratar de mejorar la situación de los sindicalistas en Colombia, para los cuales los demócratas -al influjo de poderosos sindicatos como la gremial AFL-CIO- piden mayor protección y la resolución judicial de casos de asesinato.
El presidente colombiano reconoció que su país tiene trabajo por hacer en este apartado, pero matizó que la tasa de homicidios de sindicalistas es "mucho más baja que en el país como un todo''.
Por la tarde, el mandatario se reunió con tres norteamericanos ex contratistas del Departamento de Defensa estadounidense que fueron rescatados en un operativo del Ejército colombiano el 2 de julio, luego de cinco años de cautiverio en manos de las guerrilleras Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).
Keith Stansel, Marc Gonsalves y Tom Howes pronunciaron breves declaraciones al término de su encuentro con el mandatario, agradeciendo su rescate y expresando su deseo de que haya paz en Colombia.
En el mismo acto, Uribe tomó juramento de nacionalidad colombiana a la madre de Gonsalves, Jo Rosanno, quien nuevamente se dijo "muy feliz'' por haberse reencontrado con su hijo y manifestó su esperanza de que más secuestrados por la guerrilla recuperen su libertad.
Uribe permanecerá dos días en Washington y antes de su partida a Nueva York, en donde tiene previsto participar en la Asamblea General de las Naciones Unidas la semana próxima, planea reunirse con Bush el sábado por la mañana.
México acuerda reforzar combate al crimen tras atentado
MEXICO --
El gobierno federal y los estados acordaron reforzar su combate al crimen organizado y el secuestro tras un atentado con granadas contra la población civil, visto como un intento de la delincuencia de sembrar desaliento y miedo en un México que ha visto incrementarse el nivel de violencia.El presidente Felipe Calderón y los gobernadores del país se reunieron el viernes en la capital y aprobaron una estrategia nacional antisecuestro que incluye la creación de unidades especiales en cada uno de los 32 estados.
También acordaron presentar al congreso una propuesta de ley para mejorar la coordinación de las instituciones estatales y federales de seguridad, así como autorizar un mejor equipamiento a las policías con armas automáticas y de calibre superior al actual.
"Es un momento de definiciones históricas: lo que hagamos o dejemos de hacer después de este 15 de septiembre marcará para siempre la forma en que los mexicanos del futuro recordarán este momento de nuestra historia", dijo el mandatario.
La reunión entre el mandatario y los gobernadores se realizó cuatro días después de que dos granadas fueran lanzadas en Morelia, capital del estado occidental de Michoacán, mientras millares de personas participaban en los festejos por el día de la independencia de México.
Siete personas murieron y más de 100 resultaron heridas, en un atentado que las autoridades sospechan fue orquestado por un grupo local ligado al cartel de las drogas del Golfo (denominado "La Familia") y el primero que es dirigido directamente contra población civil.
En Michoacán, el viernes aparecieron colgadas mantas en las que supuestamente "La Familia" se desliga de los atentados y culpa al grupo de sicarios de los "Zetas", también ligados al Cartel del Golfo. En los últimos días se reportó que periodistas y habitantes recibieron mensajes por teléfono celular en el mismo sentido.
Calderón dijo que el ataque refleja "la cobardía y el verdadero rostro de la criminalidad que combatimos", la cual ha escalado su violencia para intentar "sembrar el desaliento y miedo en el país".
Los gobernadores del país se sumaron a la indignación por el ataque. La mandataria del estado norteño de Zacatecas, Amalia García, exigió a Estados Unidos tomar medidas para detener la venta "indiscriminada de armamento", parte del cual es obtenido por el crimen organizado de México.
El gobernador de Michoacán, Leonel Godoy, agradeció la solidaridad por el atentado.
La Procuraduría General de la República informó que no tenían nada que ver con el ataque tres hombres detenidos el jueves en el norte del país.
La reunión también se realizó un día después de que el ejecutivo anunciara el envío de nuevas reformas en materia penal al congreso para combatir mejor al crimen y un decreto para ofrecer recompensas de entre 1.000 y 5.000 pesos (de 92 a 462 dólares) a los ciudadanos que den información que lleve a detener a delincuentes.
El acuerdo antisecuestro considera homologar los protocolos para investigar los plagios que han ido a la alza. En lo que va del 2008 se han reportado 651 secuestros, comparado con los 625 de 2007.
La Secretaría de Seguridad Pública federal informó en la reunión que de enero de 2007 al 15 de septiembre del 2008 se registraron 1.106 víctimas de secuestro, de las cuales 66 fueron asesinadas y 760 han sido liberadas. En el último mes también se reportó la desarticulación de nueve bandas y la detención de 120 presuntos plagiarios.
El secretario de la Defensa Nacional, general Guillermo Galván, dijo que ya notificó a los gobiernos estatales y federal que en unos tres meses equiparán con armas automáticas y de mayor calibre a las corporaciones que hayan aprobado exámenes de control y confianza.
El gobierno ha reconocido que el crimen organizado utiliza armas con calibres que superan a los utilizados por las policías.
Los cubanos temen alza en los precios y falta de comida
Los cubanos temen un alza de precios y falta de comida tras el golpe de dos huracanes, ante lo que el gobierno de Raúl Castro alista medidas para frenar la especulación y acelerar la producción de alimentos, alertando sobre "seis meses duros'' que hay por delante.
Una ola de rumores que dicen que todo se pondrá pronto por las nubes se desató esta semana y llevó a muchos a comprar en las tiendas de víveres, bastante desabastecidas por estos días.
"Dicen que va a subir el aceite, el jabón y la cerveza, eso es lo que anda en la calle, pero nada todavía. ¿Irán a aumentar los precios y dejar los salarios en el mismo lugar?", dijo un empleado de un pequeño paladar -restaurante- de La Habana.
Durante un recorrido por las zonas de desastre, el presidente Raúl Castro pidió "trabajo'' y "paciencia'' a la población, y dijo que "poco a poco'' se resolverá la insuficiencia del salario (17 dólares en promedio), y se eliminará la doble moneda (divisa y pesos cubanos devaluados) pero "en cuatro o cinco años''.
"Vamos a hacer un acopio de todos los recursos que podamos y aunque larguemos la tira del pellejo, vamos a resolver estos problemas'', manifestó, al señalar que antes es necesario enfrentar la emergencia.
Sin precedentes en la historia del impacto de los huracanes en Cuba, Ike y Gustav dejaron -además de siete muertes- decenas de miles de damnificados y más de 5.000 millones de dólares en pérdidas, al arrasar con cultivos, medio millón de viviendas e infraestructura agrícola, social y energética.
El viceministro de Agricultura, Alcides López, precisó que los dos ciclones dañaron un 30% de los cultivos del país, 111.000 hectáreas sembradas, en buena parte de plátano y tubérculos, básicos en la dieta de los cubanos.
"Nos quedan seis meses duros'', dijo el funcionario, aunque señaló que el gobierno ya diseñó una estrategia agrícola y "ningún cubano se va a morir de hambre, ni va a quedar desamparado''.
El gobierno anunció que el miércoles empezó el proceso de concesión de tierras en usufructo (5.500 solicitudes en un día que abarcan 67.000 ha), en un país con el 50% de las tierras agrícolas ociosas o subutilizadas, y dos millones de hectáreas disponibles para entregar.
"Se va a distribuir hasta la última hectárea disponible'', afirmó López. La entrega de tierras estatales ociosas forma parte de las medidas que tomó Raúl Castro tras asumir la presidencia en febrero, para contrarrestar la dependencia de las importaciones, pues el país debe comprar el 80% de los alimentos que consume.
Créditos a los campesinos, impulso a siembras de ciclo corto, puesta en operación de máquinas de riegos, reorganización de la fuerza de trabajo y el envío de fertlizantes e insumos para reanimar las tierras forman parte de las 85 medidas que aplicará el Ministerio de Agricultura.
Una de las principales será la protección de precios en mercados agrícolas estatales y, según dijo este jueves el diario Granma, "cortar por lo sano'' la especulación, pues "oportunistas e inescrupulosos intermediarios aprovechan para duplicar los precios de los alimentos que ya eran altos''.
"Antes de que pasaran estos dos eventos (huracanes), la cebolla estaba a 3 pesos, a 4 pesos, y ya está a 20 pesos. Subió un mil, dos mil'', dijo un hombre en un mercado de la capital. "Los frijoles a 20, ¡muchacha!, horrible'', añade un ama de casa.
Conocido popularmente como el "diploagro'' y famoso por sus precios altos, en el mercado agrícola del barrio Vedado de La Habana muchos vendedores ya anuncian "esto se va a poner peor''. "La escasez se va a sentir en un mes porque lo que se perdió fue mucho'', dice a la AFP mientras ofrece a 20 pesos, casi un dólar, sus piñas miniatura.
Wall Street sube con fuerza ante nuevo plan gubernamental
Wall Street registró el viernes otra gran racha que incluyó una ganancia de casi 369 puntos en el Dow Jones luego que los inversionistas regresaron impetuosos al mercado aliviados con un plan gubernamental destinado a restablecer la calma en el sistema financiero.El promedio industrial Dow Jones subió 368,75 puntos, el 3,35%, a los 11.388,44 y acumuló un aumento considerable de 780 unidades en dos días, mientras los bonos del Tesoro descendieron.
El nuevo plan del gobierno de Estados Unidos para rescatar a bancos con miles de millones de dólares en deudas incobrables dio alivio a los inversores que estaban preocupados de que las malas decisiones en las hipotecas afectarían a otras empresas financieras y causarían más daños en la banca y en la economía en general.
"Si se establece un plan sólido, definitivamente será un elemento positivo para amainar el dolor", dijo Stephen Carl, director de operaciones bursátiles en la firma The Williams Capital Group. Sin embargo, el plan deberá demostrar que funciona, agregó.
La decisión del gobierno de prohibir las operaciones de venta en corto, en las que se apuesta a la caída de determinados títulos, pudo contribuir en las ganancias con ajustes en las posiciones de los operadores. "Una gran parte de esto ahuyenta a todas las ventas en corto que cubrieron sus apuestas", consideró Joe Battipaglia, estratega de mercado en Stifel, Nicolaus & Co.
El secretario del Tesoro Henry Paulson dijo sobre el plan de rescate que se requiere un enfoque más audaz para retirar los activos problemáticos de los balances de las firmas financieras. Ofreció pocos detalles, pero indicó que abordará el plan con líderes del Congreso durante el fin de semana.
Los indicadores más amplios de Wall Street aumentaron también el viernes. El índice Standard & Poor's 500 avanzó 48,57 unidades (4,03%) a 1.255,08 puntos mientras el índice compuesto Nasdaq sumó 74,80 unidades (3,40%) y llegó a 2.273,90.
Las acciones con ganancias superaron a las perdedores en una relación de 7 a 1 en la Bolsa de Valores de Nueva York, donde el volumen llegó a 2.100 millones de títulos en comparación con los 2.450 millones del jueves.
Pero incluso con las ganancias del viernes, los índices no terminaron la semana con un gran cambio después de varias jornadas turbulentas. En términos semanales, el Dow perdió 0,29%, el Standard & Poor's 500 avanzó 0,27% y el Nasdaq sumó 0,56% en total.
Los bonos del Tesoro bajaron al tiempo que los inversionistas inyectaron su dinero en el mercado de valores. Los bonos con vencimiento a tres meses, una inversión segura a la que los inversionistas recurrieron ampliamente esta semana, aumentó a 0,95% respecto a 0,07% del jueves. El rendimiento del papel a 10 años avanzó del 3,81% contra el 3,53% del jueves. El rendimiento de los bonos se mueve en dirección contraria a su precio.
En otros mercados internacionales, el índice japonés Nikkei subió 3,8% y el índice Hang Seng de Hong Kong repuntó 9,61%. En Europa, el indicador británico FTSE 100 aumentó 8,84%, el alemán DAX ganó 5,56% y el francés CAC 40 se elevó 9,27%.
HRW: expulsión activistas refleja "intolerancia" de Chávez
CARACAS --
Human Rights Watch (HRW) consideró como "una prueba más de la creciente intolerancia" reinante en Venezuela la decisión de las autoridades de expulsar a dos directivos de esa organización que divulgaron un informe crítico al gobierno del presidente Hugo Chávez.Kenneth Roth, director ejecutivo de HRW, condenó el viernes en un comunicado la expulsión del equipo de la organización que en una rueda de prensa en la víspera presentó un informe que denunciaba retrocesos en los derechos humanos en Venezuela durante los casi 10 años que Chávez lleva de gobernar el país.
La organización denunció que José Miguel Vivanco, director de HRW para las Américas, y el subdirector del grupo activista, Daniel Wilkinson, fueron interceptados la noche del jueves en un hotel capitalino, donde les entregaron una carta en las que se le acusaba de ejercer actividades contra el Estado.
"Sus teléfonos celulares fueron confiscados y sus peticiones para que se les permitiera ponerse en contacto con sus embajadas les fue negado", refiere un escrito que difundió la organización desde Sao Paulo, Brasil.
HRW indicó además que Vivanco y Wilkinson fueron llevados en automóviles hasta el aeropuerto internacional en donde los obligaron a abordar un vuelo hacia Sao Paulo.
Vivanco dijo, en conversación telefónica con AP desde Brasil, que su expulsión busca "distraer la atención para evitar tratar los temas y distraer la atención (con la estrategia) de atacar al mensajero".
Sostuvo que lo sucedido es "una confirmación" exacta de los puntos que HRW planteó en su informe, y pone de manifiesto "la falta de tolerancia del gobierno del presidente Chávez a las críticas" en materia de democracia y derechos humanos.
El ministro de Comunicación, Andrés Izarra, acusó el viernes a HRW de mantener una "vinculación directa con lo que es el Departamento de Estado y con los poderes imperiales", y de ser una "fachada para intervenir en los países".
Izarra dijo a la televisora estatal que el informe que emitió el grupo activista está plagado de "infamias" y "canalladas".
"Ya basta señores, ya basta. Este gobierno está decidido a defender la dignidad del pueblo de Venezuela a proteger los intereses del país y a no permitir un nuevo esfuerzo de desestabilización en Venezuela del cual Human Rights Watch es una herramienta activa en todos estos esfuerzos", afirmó Izarra al defender la expulsión de los directivos del grupo.
HRW sostuvo en su estudio que el gobierno del líder izquierdista venezolano "en sus esfuerzos por contener a la oposición política y consolidar su poder... ha debilitado las instituciones democráticas y las garantías de derechos humanos".
Además, señaló al gobierno de ejercer "discriminación política" al despedir a trabajadores estatales afines a la oposición, incluirlos en listas negras y al negarle acceso a programas sociales a críticos del gobierno, entre otras cosas.
Mónica Fernández, integrante de la organización no gubernamental Foro Penal Venezolano, dijo a la AP que haber echado a los activistas refleja "la falta de tolerancia del gobierno venezolano a recibir críticas. El gobierno de Chávez pretende tapar las cosas que ya son insostenibles desde el punto de vista de la violación de derechos humanos con esta expulsión".
Un comunicado del presidente del partido opositor Social Cristiano, Luis Ignacio Planas, expuso que la decisión de las autoridades "es una nueva demostración del poco interés que por los derechos humanos tiene este gobierno, que es intolerante y que además no tiene argumentos suficientes para desvirtuar" el informe de HRW.
El canciller venezolano, Nicolás Maduro, declaró esta madrugada que Vivanco y Wilkinson fueron expulsados por cometer "graves violaciones" en su condición de "turista en nuestro país".
"No vamos a soportar, ni vamos a tolerar que venga ningún extranjero a tratar de mancillar la dignidad de nuestra república... y de las instituciones de nuestra democracia", añadió.
El Ministro de Relaciones Exteriores informó en un comunicado que Vivanco, es un chileno que llegó al país con un visado de turista, y que Wilkinson "portaba un pasaporte estadounidense".
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Socialism for the Rich, Naked Capitalism for Everyone Else
Joseph PalermoFor twenty-eight years, since the beginning of Ronald Reagan's first term, we have been subjected to a steady stream of Republican propaganda claiming that if we just got government out of the way and "off our backs," deregulate the economy, and let the market work its magic, prosperity would "trickle down" to the average American citizen. In the mid-1980s, corporate lobbyists descended on Washington, threw huge amounts of campaign cash around, and told us that deregulating the Savings and Loan industry would be a great idea. John McCain and his good friend Charles Keating from Arizona were big advocates of this scheme that turned out to be a disaster that cost taxpayers $500 billion. Phil Gramm, when he was Senator from Texas (and John McCain's choice for president in 1996), worked up another "deregulation" bill that President Bill Clinton signed into law in 1999 that repealed the Glass-Steagall Act of 1933, thereby destroying a key firewall between commercial and investment banks.
We witness the same over-confident, smug market fundamentalists and laissez-faire devotees, businessmen and women who hate "government" when it provides aid to families with dependent children, or food stamps, or health coverage for poor people -- businessmen and women who denounce as creeping "Socialism" any attempt by the government to redistribute some of the nation's wealth to the working middle class or to the poor -- now come to Washington, hat in hand, begging the federal government to fix their self-created problems brought on by their own unbridled greed and recklessness and demanding massive infusions of tax-payer dollars in the form of bail out after bail out.
It's Socialism for the rich and laissez-faire capitalism for everybody else.
What Bear Stearns, Lehman Brothers, Merrill Lynch, and now American International Group Corporation have in common is that they all hired Washington lobbyists and lavished campaign donations on politicians to push through with no public support the radical deregulation of the financial sector. Then they proceeded to create entire new categories of "financial products," derivatives and the like, that amounted to nothing but a giant Ponzi scheme. And when it all collapsed due to their Wild West, shoot 'em up, freebooting, 19th Century-style rapacious business practices, they turn to the government for a hand out to keep the whole goddamned system from descending into another Great Depression.
For historians like myself, and for people like Kevin Phillips, William Greider, and other observers, this collapse of our financial sector was like watching a slow motion train wreck. The laissez-faire proponents for the past thirty years have perpetrated the biggest lie ever told to the American people. And George W. Bush, as with everything else, took this lie to its extreme. He gave the financial industry everything it wanted, and he appointed their lackeys and puppets to run the regulatory agencies that were set up in the wake of the Great Depression to avert exactly the kind of catastrophe that we're witnessing on Wall Street today.
George W. Bush spent the first months of his second term on a 60-city tour where he answered prefabricated questions in phony "town hall" meetings claiming that privatizing Social Security -- taking $1 trillion out of the trust fund and throwing it to his backers on Wall Street -- would be a great idea. And even though the Republicans ran the House of Representatives with Denny Hastert and Tom DeLay, and the Senate with Bill Frist, and the presidency, the American people did not fall for this legalized form of grand larceny. And it's a good thing they didn't. Had Bush been able to get his way and throw a third of the Social Security trust fund at these same damaged, greedy firms we would be witnessing with the current financial meltdown the demise of Social Security.
The libertarians like Ron Paul, Bob Barr and others tell us that the government should not bail out these Wall Street hucksters and gangsters and should let them go down and pay the price for their own mismanagement and bad investments. I agree philosophically with this point of view. But I don't think it's realistic unless one is willing to see the nation enter an economic collapse that would probably look a lot like what Japan and Argentina endured in the late 1990s only worse. The fact is these giant firms, with their billionaire owners and their army of pin-striped men driving Jaguars and flying in private jets to their summer homes to visit their mistresses, have a stranglehold on the nation. They are too big to fail because it would bring on another Great Depression.
Everybody knows that what is needed is exactly the opposite from what we've had for the past three decades. Instead of a government that is asleep at the switch and filled with cronies and hacks from the industries that are supposed to be subject to oversight, we need an activist state that rebuilds the firewalls between the commercial and investment banks; we need a "re-regulation" of the economy, especially key sectors that the entire nation depends on -- finance, energy, health care, food, etc. In short, what we need is a "New" New Deal in this country. We need an IRS and a Justice Department that can strike fear in the hearts of these captains of industry.
Ronald Reagan is often looked upon as the Republicans' Franklin Roosevelt. But Reagan sold the nation a bag of goods. We can finally see clearly the failed results of this three-decade experiment in laissez faire capitalism. It has nearly destroyed the middle class in this country, greatly widened the gap between the super rich and everybody else, destabilized vital sectors of our society, and made the United States a laughing stock abroad.
As a historian I always wondered what evidence of the free market utopia people like David Brooks (with his "ownership society") and the army of ideologues and market fundamentalists marching in lockstep out of the Cato Institute and the Heritage Foundation and the American Enterprise Institute and Gover Norquist's Americans for Tax Reform, and all the other shills and hucksters who sold this tripe to a naive public like a greasy used car salesman selling a lemon -- I always wondered where is their laissez-faire utopia? Are they referring to what America looked like in 1880? A time with nearly zero federal government regulations? With no child labor laws, no limits on the hours worked, no weekend or paid overtime, no minimum wages, no workers' safety regulations, no Security and Exchange Commission, no Federal Deposit Insurance Corporation, no worker pensions or Social Security, no right to form independent labor unions, and no vote for women. Is this their laissez faire utopia that deregulation was supposed to produce?
Today, we have the worst of both worlds. Government bailouts for the rich -- naked capitalism for everybody else. This whole mess could have been avoided if the generation that followed the New Deal had the common sense and decency to understand that you cannot turn over capitalism to the capitalists. Greedy individuals will always figure out clever new ways to make their own piles of money at the expense of their fellow citizens and at the expense of their nation's wellbeing. Whether it's the Savings and Loan scandal of the 1980s or the Dot.Com bubble of the 1990s or the Enron collapse or the mortgage meltdown -- it's always the same old story. They pass on the wreckage to the taxpayer as they always do. It's time to put to rest once and for all the Big Lie that deregulation and privatization of government institutions will bring the nation anything other than calamity after calamity.
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