Anunció que se convertiría en el precandidato que promete recuperar lo mejor del partido: todo aquello que lo llevó a ser la mejor alternativa...
Ricardo Alemán
Santiago Creel Miranda fue de los pocos panitas de “alcurnia” y el único precandidato presidencial que no asistió al cumpleaños 49 de Felipe Calderón, celebrado el sábado 20 en la residencia oficial de Los Pinos.
No sabemos si Creel no fue invitado o no pudo cambiar la agenda. Lo cierto es que entre los azules son muchos quienes no ven con buenos ojos al ex candidato presidencial, al que incluso algunos prometen todo su apoyo, pero le piden discreción, ya que no quieren pagar el costo de aparecer como promotores del candidato estigmatizado por la casa presidencial.
Lo curioso del caso es que en semanas recientes la malquerencia contra Creel Miranda se intensificó a niveles delirantes, una vez que el también ex senador deslizó que no estaría dispuesto a pasar por alto las traiciones al partido, las desviaciones ideológicas y los abusos de poder cometidos por gobiernos azules. Es decir, que Santiago Creel anunció que se convertiría en el precandidato que promete recuperar lo mejor del PAN: todo aquello que lo llevó a ser la mejor alternativa de gobierno.
En pocas palabras, que entre la clase política azul era un secreto a voces que Creel rompería con un sector de su partido y del gobierno federal, y con el panismo incrustado en gobiernos municipales y estatales. Y es que si algo ha detectado Creel en los muchos meses que lleva recorriendo el país para buscar el voto de los militantes y los adherentes, es que no pocos de éstos se muestran decepcionados por las traiciones a la doctrina azul.
Por eso, Creel montará su precampaña presidencial del PAN, en una severa crítica a las desviaciones mostradas por el partido y en un abierto rompimiento con los grupos que han llevado al azul a convertirse en una mala copia del PRI. Así, y una vez operado el cambio de estrategia, Creel Miranda intentará mostrarse ante la militancia de todo el país como el precandidato presidencial que representa las mejores tradiciones y la verdadera cultura democrática del PAN.
Por lo pronto, la mañana de ayer lunes, en entrevista periodística —en la frecuencia de W Radio—, Creel dijo: “Requerimos afianzar la identidad panista, realmente panista, que nada se parezca al PRI, ni en su cultura ni en sus formas ni en su visión; igualmente con el PRD, porque tenemos una identidad propia de un partido humanista… lo que sí estoy haciendo es rebelarme contra ciertas cuestiones que han ocurrido en mi partido, estoy buscando ser, una vez que se abra el registro, el representante del militante libre, porque yo veo prácticas y formas que no son propias del PAN…” ¿Qué significa lo anterior?
Está claro, para todo el que quiera verlo, que Santiago Creel ya inició el rompimiento con un sector de la estructura partidista, con algunos grupos de poder de los gobiernos azules y que empieza a marcar diferencia entre el PAN que se mueve en el primer círculo de Felipe Calderón y el que no quiere ser parte de la cargada, del clientelismo, el dedazo, el uso de recursos públicos y, en general, las prácticas nada democráticas y propias del PRI que por décadas cuestionó el PAN.
Pero lo más interesante es que Santiago Creel no sólo va arriba en todas las encuestas de los presidenciables del PAN, sino que lleva una considerable ventaja entre la militancia azul de los distintos estados del país con mayor número de militantes y adherentes.
Y es que, si se hace el recuento de los militantes y adherentes del PAN por estado, resulta que Santiago Creel está por alcanzar la simpatía de los 350 mil votantes que se requieren para mantener ventaja como candidato presidencial. Creel encabeza las preferencias en los 12 estados con más de 50 mil militantes y adherentes, que son los siguientes.
En el Estado de México, 166 mil; Veracruz, 158 mil; Jalisco, 153 mil; Puebla, 95 mil; Distrito Federal, 93 mil; Michoacán, 82 mil; Oaxaca, con 77 mil; San Luis Potosí, 77 mil; Yucatán, 70 mil; Chiapas, 61 mil; Guanajuato, 59 mil y, Sonora, 58 mil.
En otras palabras, que si en la casa presidencial se duermen en sus laureles, Creel se les va, se va, se va y… Al tiempo.
EN EL CAMINO
No extraña que pillaran a otro narco entre empleados de Aeroméxico. Lo cierto es que la empresa aérea va directo a convertirse en una de las peores del mundo. Mal servicio, caro, maltrato a la gente, robos, retrasos, sobreventa de lugares y muchas pillerías… En otro asunto, Miguel Osorio ya es secretario de Operación Política y Delegaciones del CEN del PRI. O sea, dedo chiquito de Peña Nieto.
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